Escápate a Oporto y descubre una de las ciudades más impresionantes de Europa. Elige uno de nuestros hoteles seleccionados con los siguientes requisitos: buena ubicación en el centro de Oporto y buena relación calidad - precio. Hoteles pensados para aquellos viajeros que buscan alojamiento práctico y estratégico para descubrir a fondo la ciudad y disfrutar del Oporto más completo. Pasea por su Avenida de Aliados, siéntete como un personaje de Harry Potter en la librería Lello, prueba alguna de sus famosas comidas y tapas, conocidos como petiscos, visita las famosas capillas del Carmen y las Almas y sus fachadas embaldosadas, haz algunas compras en la Rua de Santa Catarina, descubre la Catedral y su mirador, la iglesia de San Ildefonso, acércate a la Ribiera y cruza el Puente de don Luis I para deleitarte con los fabulosos vinos de Oporto en alguna de sus muchas bodegas. Por la noche, disfruta del buen ambiente de Oporto, de la simpatía de sus habitantes, siéntate a probar su deliciosa gastronomía, su vino verde y tómate alguna copa en las Galerías París. ¿Te parece buen plan?
Si quieres añadir transportes para llegar hasta Oporto, si necesitas un coche de alquiler en Oporto, si quieres añadir o quitar días a la experiencia propuesta o si quieres personalizar tu viaje, no dudes en contactar con nosotros y buscaremos la opción que más se adapte a ti.
Hay cuatro zonas importantes para ver en Oporto.
Alrededores de Oporto
Si cuentas con más de 2 o 3 días, en los alrededores, hacia el norte, se encuenta la ciudad de Matosinhos. Podrás llegar con transporte público o en coche. Matosinhos es una ciudad pesquera que, aunque no destaca por su estética, está llena de restaurantes donde comer el mejor pescado fresco y marisco de la zona. Además, si viajas en verano, la Praia de Matosinhos es la más cercana y accesible desde Oporto. Si eres un amante del pescado fresco, este es tu sitio.
Un poco más lejos hacia el sur, a unos 50min en coche, encontrarás Aveiro, conocida como la "Venecia de Portugal" por sus canales en la ría. Al llegar puedes coger un Moliceiro, uno de los barcos típicos de la ciudad, que os dará un tour alrededor por los canales mientras os explican la historia de la ciudad. También se puede llegar en transporte público: bus, tren o taxi.
Si te animas a visitar Aveiro, puedes acabar el día acercándote hacia la Costa Nova, a 20 minutos en coche desde Aveiro (aunque también se puede llegar en transporte público sin complicaciones) para haceros unas fotos en Los Palheiros, las famosas casetas con rayas de colores en la playa. Estas dos ciudades son pequeñas por lo que las recorrerás rápidamente.
Si viajas a Oporto no puedes perderte sus famosas franceshinas, un sándwich de lo más completo y abundante. Entre sus ingredientes encontrarás filetes de carne, salchichas portuguesas, queso fundido y una salsa especial a base de tomate que lleva un gran proceso de elaboración. Se suele servir con un huevo encima y acompañado de patatas.
La gastronomía portuguesa es una delicia y parte importante de la ciudad de Oporto por lo que pararte a probar algunas de sus muchos petiscos y dulces típicos es imprescindible.
Recorriendo la ciudad, verás que las cafeterías están llenas de pasteles todo el día. Hay dulces y salados de todo tipo, todo buenísimo. Vale la pena probar los Pastéis de Nata que, aunque son típicos de Belém (Lisboa), los elaboran en muchas pastelerías de Oporto. Es como la paella, puedes comerla en todas partes de España, no solo en la Comunidad Valenciana. Una cafetería donde sentarse a comer un buen pastel dulce o salado, es la Confitería Bolhao, un lugar tradicional con mucho encanto y con una vitrina enorme donde elegir tu manjar. Sin duda, nuestro sitio favorito para desayunar.
Las francesinhas más típicas son las del Café Santiago, pero nuestras favoritas son las de Brasâo, hay una en Aliados, un sitio ideal para cenar ya que, además de hacer buena comida, el restaurante es muy bonito. Eso sí, no te olvides de reservar si no quieres quedarte sin mesa...
Para comer polvo (pulpo), bacalhau (bacalao) o tripas (parecido a los callos) hay muchos restaurantes alrededor de la Ribera donde podrás disfrutar de unas bonitas vistas al río. Allí hay sitios, más y menos turísticos (como el Escondidinho do Barredo), donde sirven menú y platos a la carta. Para abrir boca, nada mejor que hacerlo con unos petiscos (sería algo parecido a las tapas españolas) o un buen caldo verde. ¡Delicioso! Otra opción es ir a los alrededores de San Bento donde hay sitios más pequeños y tradicionales.
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