Viajar a Mallorca siempre es una buena idea pero si además es recorriendo los pueblos más bonitos de la isla, las vacaciones son sublimes. Este plan incluye 6 noches de alojamiento en los pueblos más bonitos de Mallorca (2 noches en Alcudia, 2 en Pollença y 2 en Fornalutx), la mejor ruta en coche para descubrir la isla y algunos consejos prácticos para tu viaje. ¡Qué bonita eres, Mallorca!
Alojamiento en Alcudia
Alojamiento en Pollença
Alojamiento en Fornalutx o alrededores (según disponibilidad)
Itinerario en coche para que no te pierdas nada en tu viaje
Ruta diaria para descubrir los pueblos más bonitos de España ubicados en Mallorca
Vuelos (solo si se añade en el buscador)
Coche de alquiler (solo bajo petición)
Servicio de recogida y retorno al hotel
Otras entradas no mencionadas
Otros traslados no mencionados
Guía turístico
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Hoy llegarás a Alcudia, uno de los pueblos más bonitos de España ubicado en el nordeste de Mallorca, a 45 minutos en coche desde el aeropuerto de Palma. Una vez te acomodes en el hotel, es momento de descubrir su centro histórico. Nada más llegar a este municipio, te llamará la atención sus murallas medievales. Su ubicación estratégica convirtió a este bonito municipio en un lugar que recibió multitud de ataques, sobre todo de piratas que querían expoliar la ciudad. Así, estas murallas fueron derribadas por los atacantes y construidas de nuevo a lo largo de los siglos para mantener a Alcudia y sus habitantes a salvo. De esa época se conservan aún el foso, algunos trozos de muralla y dos puertas por las que se accedía a Alcudia y que son el icono de esta localidad. Dentro de estas murallas, encontrarás la Iglesia de San Jaime, patrón del pueblo, callejuelas con casitas y pequeños comercios tradicionales, el Paseo Mare de Déu de la Victoria, donde los martes y domingos se monta el mercado, la Puerta del Moll y la animada plaza del ayuntamiento donde no faltan restaurantes y heladerías.
En el centro de Alcudia encontrarás una gran variedad de opciones tanto para comer como para cenar: restaurantes italianos, mallorquines, kebabs, hamburgueserías, cervecerías... Aquí van nuestras recomendaciones:
Restaurante Ca'n Pantina: tapas, platos mallorquines, carnes y pescados. Bonito y con una buena relación calidad-precio.
Sa Portassa: restaurante especialista en pa amb olis.
Carbón moreno: carnes y hamburguesas.
Es Racó de Ronda: tapas y embutidos ibéricos.
Heladería Garrido: los mejores helados de Alcudia. ¡No puedes perderte su famoso helado de naranja a la fresa!
Cervecería Santa Ana: ideal para tomar unas cervezas y picar algo.
Disfruta del segundo día en Alcudia descubriendo su fabulosa playa kilométrica de arena blanca y aguas turquesas. Si viajas en verano puedes quedarte a pasar el día y si viajas en los meses más fríos, puedes pasear por la orilla y disfrutar de la tranquilidad del invierno. Por la tarde, es buen momento para ir hasta el Puerto de Alcudia, siempre animado en cualquier mes del año. Allí se encuentra una pequeña playa, llaüts (típicos barcos mallorquines), tiendas de moda, bares, restaurantes y un bonito paseo marítimo. Nuestra recomendación es que te quedes a cenar por aquí y, si te apetece, alargues la noche en alguno de sus locales chill out, pubs o discotecas.
En el puerto de Alcudia encontrarás muchas opciones gastronómicas ya que es el lugar preferido de los residentes y viajeros. Nuestras recomendaciones son:
Hoy dejarás Alcudia, uno de los tres pueblos más bonitos de Baleares, para dirigirte al segundo pueblo catalogado como Pueblo más bonito de España: Pollença. Este municipio costero está a poca distancia de Alcudia por lo que en menos de 15 minutos en coche ya habrás llegado a su centro histórico. Una vez te acomodes en tu hotel, es hora de salir a descubrir sus callecitas, iglesias, su Plaza mayor y sus preciosas casas mallorquinas. Piérdete por sus calles y sube El Calvario, una colina empinada de 365 escalones que termina en una bonita iglesia (Iglesia del Calvario) y un mirador desde donde se aprecian las mejores vistas de Pollença. En la Plaza Mayor encontrarás restaurantes y bares donde sentarte a comer o a tomar algo en sus terrazas. El domingo, en esta misma plaza también podrás disfrutar de su mercado: frutas, verduras, flores, ropa, artesanías... Sin duda, uno de los mercadillos más bonitos de Mallorca. Si te gusta el arte, también puedes visitar el Museo de Pollença, con pinturas y piezas arqueológicas de varios artistas.
Los primeros propietarios del monte Calvario fueron los Templarios quienes recibieron estos terrenos por su ayuda a Jaime I de Aragón en la Conquista de Mallorca, en 1229. Los templaros se establecieron como auténticos señores feudales con una gran autonomía respecto a la clerecía y a la monarquía. Esto les permitió abusar de su poder, cobrando tributos a quienes accedían a sus territorios, obteniendo hasta su propia iglesia, la Mare de Déu dels Àngels, ubicada en la Plaza Mayor de Pollença y, lo que es peor, impartiendo su propia justicia a través de la horca. De hecho, la cima de El Calvari, antes se le conocía como el Puig de les Forques (el monte de las horcas). Con el paso de los años, Pollença creció y se convirtió en una de las localidades más importantes de Mallorca en el siglo XIII. Con el crecimiento de la villa y cansados de los abusos, crecieron también los enfrentamientos de los ciudadanos de Pollença con los Templarios. Finalmente, la presencia de los Templarios en Mallorca acabó en 1312 con la desaparición de la Orden por mandato del Papa.
Aprovecha tu estancia en Pollença para conocer su animado puerto y su playa. Caminando por el paseo marítimo de Puerto Pollença encontrarás bonitos restaurantes junto al mar, cafeterías con encanto, tiendas de ropa, souvenirs, palacetes mallorquines y una pequeña playa de arena con hamacas, sombrillas y parque infantil. Nuestra recomendación es que te quedes a comer o a cenar por el puerto ya que hay una gran oferta gastronómica y el lugar es precioso. Si viajas fuera de los meses de verano, puedes ir con tu coche hasta la playa de Formentor y el famoso faro con uno de los atardeceres más emblemáticos de Mallorca. Eso sí, si viajas en temporada alta, la carretera está cerrada para vehículos privados con motivos de conservación del medio y prevención de accidentes de tráfico, así que solo podrás acceder en transporte público. El autobús sale del mismo puerto así que no te será difícil llegar.
Restaurante Ca Les Monges: comida mallorquina, bocadillos y tapas que destacan por su producto local.
Restaurante - bodega Ca'n Ferrà: gastronomía mallorquina tradicional.
Restaurante Abbaco: cocina creativa, fresca y moderna. Gastronomía mediterránea, sudamericana y asiática. Cuenta con opciones vegetarianas, platos sin gluten y elaboración al momento de sushi.
Dakota: hamburguesas y platos tex mex. Ubicado encima del mar a precios razonables.
Restaurante del Club Náutico: especialistas en pescados y mariscos. Abre todo el año.
Ca'n Pescador: especialistas en paellas y carnes maduradas en primera línea de mar.
Para llegar a Fornalutx desde Pollença puedes hacerlo desde dos vías: la rápida, por la autopista o la bonita, nuestra ruta recomendada. No tardarás mucho más y pasarás por los bonitos pueblos de Lluc y Escorca a través de una carretera rodeada de paisajes espectaculares de la Sierra de Tramuntana. En 1h y 15 minutos habrás llegado a tu destino, eso sin contar las paradas que quieras hacer durante el trayecto. De camino, desviándote un poco, si te apetece también puedes parar en Sa Calobra, una bonita playa cuyo mayor atractivo son las curvas de su carretera y sus vistas al mar. Al llegar al pequeño pueblo de montaña de Fornalutx, el primero de Baleares galardonado como Pueblo más bonito de España, te darás cuenta de su gran belleza y lo fácil que es recorrerlo por sus callecitas y casa empedradas. Una vez dejes las maletas, aprovecha para conocer este pueblo de ensueño. Pasea por sus callejuelas empedradas mientras observas los tejados de las casas. De esta manera apreciarás que algunos de ellos, todavía conservan unas características tejas pintadas. Esto era algo común y tradicional en el siglo XVI en Mallorca y la gran mayoría se conservan en Fornalutx y en Sóller, su pueblo vecino. Estas tejas se pintaban a mano en color rojo: figuras geométricas, vegetales, elementos de la vida cotidiana, animales y temas religiosos son algunas de las composiciones que se llevaban a cabo sobre cada teja con la creencia de que así se protegía la vivienda y sus habitantes de agresiones externas.
Fornalutx puede considerarse un municipio de interés paisajístico y arquitectónico, no en balde está catalogado como uno de los pueblos más bonitos de España además de haber sido premiado también por su labor de conservación y respeto a la naturaleza. Caminando por sus bonitas calles, encontrarás el Ayuntamiento, justo al inicio del Carrer Major (Calle Mayor). Este ayuntamiento está custodiado por una torre de defensa del siglo XVII, muy bien conservada. Si continúas con el paseo, por esta misma calle, te toparás con la Plaza España, el núcleo del pueblo y el principal lugar de encuentro de los residentes de Fornalutx. Aquí se ubica la Iglesia de la Nativitat de la Mare de Déu, uno de los edificios más emblemáticos de este municipio. Originaria del siglo XIII, ha sido modificada a lo largo del tiempo por lo que tiene algunos rasgos de otras épocas, como el portal gótico que da directamente al cementerio, conocido como “El Fossar”. Aunque pequeña, esta parroquia conserva en su interior obras artísticas de los siglos XII y XIII y, sin duda alguna, su visita es bien merecida. En esta misma plaza encontrarás cafeterías y restaurantes. Te recomendamos que te sientes en alguna de ellas y te relajes contemplando el paisaje.
Aunque Fornalutx es un pueblo pequeño, hay diferentes opciones para comer y cenar. Desde restaurantes típicos mallorquines hasta restaurantes italianos.
Fornalutzx está ubicado en plena Sierra de Tramontana, en mallorquín Serra de Tramuntana. Esta sierra fue declarada Patrimonio Mundial de la UNESCO en 2011. Mide casi 90 kilómetros de largo y se ubica en el nordeste de la isla de Mallorca, de ahí su nombre ya que, según la rosa de los vientos locales, el viento de esa zona es el llamado viento de Tramontana. Este sistema montañoso es el más importante de las Islas Baleares y se extiende desde Andratx hasta el Cap de Formentor. En esta sierra se encuentra el Puig Major, la montaña más alta de Mallorca.
Para el día de hoy, tienes dos opciones según tus intereses: quedarte en Fornalutx y desconectar de la ciudad, o visitar Sóller, su animado pueblo vecino ubicado a tan solo 4km. Sóller es otro precioso municipio ubicado en plena Sierra de Tramuntana que cuenta con un casco histórico marcado por la influencia del Modernismo catalán y las fortunas que se amasaron con la exportación de cítricos al resto de Europa. En la plaza de Sóller encontrarás la Iglesia de San Bartolomé, con una fachada modernista espectacular, el fastuoso banco de Santander y la calle comercial que desemboca en la plaza: el Carrer Lluna (Calle Luna). Además, en el centro de Sóller también se encuentra la parada del emblemático tranvía que te llevará hasta el puerto donde podrás disfrutar de su playa y caminar por el paseo marítimo lleno de restaurantes, bares, cafeterías, heladerías, supermercados, comercios tradicionales y tiendas de souvenirs.
Sóller es un lugar con una gastronomía fabulosa gracias a su clima que le permite el cultivo de limoneros, naranjos y olivos, y a su mar donde destacan algunos de los mariscos y pescados más valorados de las Baleares. Aquí va una lista de los platos y productos tradicionales de Sóller que te recomendamos que pruebes:
Encontrarás una gran oferta de restaurantes en el centro de Sóller, en la Plaza Constitución, y a lo largo del paseo marítimo del Puerto de Sóller.
El tranvía de Sóller fue el primer tranvía eléctrico de Mallorca. Se fabricó en 1913 para unir el pueblo con el Puerto de Sóller. En un principió se diseñó para el transporte de pasajeros pero las necesidades y la gran actividad comercial del momento, hicieron que se utilizara también para el transporte de mercancias, incluyendo hasta un vagón isotérmico para transportar el pescado del puerto al centro de Sóller.
De regreso al aeropuerto o al puerto de Palma, si viajas con suficiente tiempo, puedes aprovechar para parar en el bonito y pequeño pueblo de Deià o Valdemossa, en la Sierra de Tramuntana. Recuerda salir con tiempo para evitar contratiempos de último momento. ¡Buen viaje!
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